A la conquista de Andalucía II
Tras cerca de una hora y media de tren llegué a la estación Santa Justa de Sevilla como a las 21 de la noche, justo cuando el Betis lograba un empate milagroso en el Camp Nou, que dejó líder al Real Madrid a pocas fechas del final de la Liga.
Tomé taxi para el centro (obviamente me cobró más de lo que debía) y hablando de fútbol, me bajé en la plaza El Salvador, para juntarme con mi compañera argentina del master que hace las prácticas en el Diario de Sevilla, Feliciana, quien gentilmente me ofreció techo para estos días.
Ella aún no había llegado -porque venía viajando de Granada-, por lo que empecé a caminar -haciendo hora- por las callejuelas del viejo centro y (afortunadamente) de repente me encontré con una de las típicas proseciones de la Virgen que hacen en Sevilla.
Luego de apreciar esta curiosa fiesta, deambulé por el centro disfrutando de sus calles, hasta que llegué a la Catedral y aprecié la Giralda... luego el Alcázar, las flores... fue amor a primera vista.
"Sevilla qué maravilla" reza un rótulo en un piso ubicado entre los varios pasajes del barrio Santa Cruz. A mi juicio, por ahora le pelea a Salamanca el título "lo mejor de España" (de entre lo que he visto).
El Guadalquivir navegable, las flores por todos lados, los palacios, el Parque de María Luisa (donde me tomé fotos con palomas hasta en la cabeza), la Torre del Oro y de la Plata, la avenida de las Palmeras (donde encontré el pabellón (y el ahora popular bar y Escuela de Arte) de Chile de la expo Sevilla de 1924), el barrio de Santa Cruz, la gigante Plaza de España (la foto principal), la Giralda, el Alcázar... y "la caló". Todo hace de Sevilla una visita muy atractiva.
Pero aún falta algo de la bella Andalucía... ahora tengo que ir a por Granada... a por la Alhambra.
Ver fotos
Sevilla |
No hay comentarios:
Publicar un comentario